
Hay algo que no se ve todos los días creciendo en las laderas del valle del Río Entiat, en el centro-norte de Washington: un sinfín de acres de perales tiernos.
Hay tantos, de hecho, que los pedidos de árboles a varios viveros casi agotan el suministro de portainjertos de perales de la industria. Surge del deseo de producir suficientes árboles de la variedad HW 624 para abastecer el nuevo programa Happi Pear de Stemilt Growers.
La inversión es una gran apuesta por el futuro de las peras, según Mike Taylor, propietario de esas nuevas huertas en Entiat y vicepresidente de desarrollo empresarial de Stemilt Growers.
En otras palabras: Está cien por ciento comprometido.

“Necesitamos una renovación. Es cuestión de seguir adelante o morir”, dijo Taylor refiriéndose de la industria de la pera de Washington. “Tenemos huertas viejas y anticuadas, y no ha sido fácil saber qué hacer”.
El lanzamiento de la pera variedad Happi -que ofrece más eficiencias hortícolas a los productores y algo nuevo que entusiasma a los consumidores- marca el primer paso, dijo Taylor. Además, cree que sus estrategias pueden ser la base para futuras innovaciones.
“Con un mejor sabor, comercialización exitosa y la satisfacción del consumidor podemos aumentar las ventas del sector de la pera”, afirmó. Compartió el mismo mensaje este invierno, cuando la industria de la pera le honró con el Premio Pera de Plata (Silver Pear Award).
Desde luego, como una variedad cultivada y desarrollada bajo normas específicas, las peras Happi no representan una solución para todo el mundo. Stemilt limitó la primera fase de plantación (la mayoría de las cuales son plantadas por sus productores externos como Taylor) por ahora, pero si gana la aceptación en el mercado, como espera Taylor, se autorizará su cultivo a otros almacenes en el futuro.
La empresa agrícola Mount Adams Fruit ya ha plantado algunos de los perales en sus huertas a lo largo del Río Columbia, cerca de Oregón, dijo el vicepresidente Doug Gibson.
“Estamos súper entusiasmados. Es una pera de verano con más experiencia de consumo rápido”, afirmó. Sus jóvenes huertas acaban de entrar en producción, por lo que Stemilt empacó y comercializó la fruta el año pasado, pero a medida que crezca el volumen, Mount Adams planea empacarla y venderla también.
La asociación con una empresa de otra región ayudará al nuevo programa a protegerse contra daños por heladas u otras pérdidas del cultivo, añadió Gibson.
Gibson está de acuerdo con Taylor en que estas peras ofrecen nuevas oportunidades: Además de una nueva variedad, la inversión del sector en mejores prácticas de maduración ha mejorado la calidad de peras de la variedad Anjou también.
La nueva pera
Recorriendo un bloque de HW 624 en su cuarto año de producción cerca de Entiat, Rob Blakey, director de investigación y desarrollo de Stemilt, se muestra satisfecho con la carga de cultivo, especialmente teniendo en cuenta los daños causados por el frío en la región. El hecho de que la variedad se cultive antes es fundamental para que los productores obtengan un flujo de caja, afirmó.
Enumera los aspectos positivos de la variedad HW 624: La pera de verano tiene un periodo de cosecha más amplio, un sabor único que puede disfrutarse crujiente y dulce que se derrite en la boca, es tolerante a la enfermedad fuego bacteriano y a la peste psila del peral. Estos atributos la hacen más eficiente de cultivar y manipular que las variedades tradicionales, al igual que las eficiencias que atrajeron a la industria de la manzana a la variedad WA 38, dijo.

Los productores los han plantado en sistemas de espaldera alto, con espaciamientos de 5 por 14 pies o de 4 por 12 pies, dijo, o han optado por plantarlos más apretados con múltiples ramas líderes para tratar de distribuir el vigor. Al igual que un manzano de alta densidad, los sistemas más intensos tienen menos margen de error en términos de formación, dijo.
La transición de las huertas tradicionales a los bloques de una sola variedad de alta densidad también exigió una investigación sobre los polinizadores y la aplicación de polen, ambos estudios aún están en curso, dijo Blakey.
Blaine Smith, un productor de la zona de Cashmere con una plantación de peras HW 624 en su segundo año de producción, dijo que se sintió atraído por la forma en que la variedad “crece más como un manzano” y produce sin dificultad muchas ramas laterales.
“Creemos que podemos obtener fruta más cerca de la rama principal y tener más ramas pequeñas de fructificación”, dijo de su sistema de alta densidad, formado con tres ramas líderes y mantenido con la técnica de poda clic. “El problema es que estos nuevos bloques cuestan USD $60,000 por acre. Es muy difícil para los pequeños productores”.
El nuevo manual de operación
Dados los costes de la replantación, los productores de peras necesitan un programa, no sólo una nueva variedad, dijo Blakey. Eso significa desarrollar también una base de conocimientos sobre cómo cultivar, comercializar y manejar una nueva variedad. La nueva línea de empaque de peras de Stemilt será de gran ayuda.
La pera HW 624 es el primer lanzamiento con este enfoque, pero Blakey tiene otras 22 variedades de peras en fase de evaluación, con la esperanza de encontrar algunas más que puedan satisfacer diferentes necesidades de productores y consumidores.

Las eficiencias por sí sola no bastan. La pera también debe demostrar que su rentabilidad es muy superior al coste de invertir en las nuevas plantaciones, afirmó Taylor. Ello requiere un manejo de primera y una comercialización inteligente.
“La economía de la huerta tiene que ser realmente exitosa para justificar la plantación”, afirmó. “Estamos juntos en esto. Es un taburete de tres patas: el productor, que está dispuesto a asumir el riesgo, el empacador / comercializador, y el consumidor, que debería estar dispuesto a pagar por ello si esta pera puede ser de la mejor calidad y llena sus expectativas.”
¿Pagarán más los consumidores por las peras de calidad? Los datos del sector de las manzanas así lo sugieren, dijo Taylor, pero también quiere ver cómo las peras a medida que avanzan se diferencian del modelo de las manzanas.
¿Esperan disponibilidad de la fruta todo el año? No, Taylor prefiere que el año se divida en temporadas para que las variedades tradicionales y las nuevas puedan aprovechar sus puntos fuertes y sus ventanas de calidad óptimas.
¿Y los precios serán similares a los de las manzanas a la hora de vender cantidades grandes? No, cree que las mejores peras pueden exigir mejores precios. (Y al decir ‘mejores peras’, se refiere tanto a nuevos cultivares como Happi como a cultivares tradicionales que se manejan mejor).
“Tenemos que hacer que el producto sea lo suficientemente interesante como para que pueda venderse a USD $2 o $3 la libra”, dijo. “No tenemos las eficiencias de las manzanas, y no vamos a conseguirlas. Tenemos que poner un precio a las peras que permita avanzar esta categoría de fruta, o moriremos lentamente.”
—por Kate Prengaman
Este artículo ha sido traducido por Jean Dibble y revisado por Jutsely Rivera. Puede ponerse en contacto con Jean en jean@goodfruit.com.