Los resultados iniciales de un estudio en el que se aplicó material orgánico de cobertura a un huerto de cerezas en Oregón indicaron que la aplicación no aumentó el rendimiento, el empaque final, el tamaño de la fruta, la calidad de la fruta ni el nitrógeno foliar—, al menos en los primeros dos años.
Sin embargo, el material orgánico de cobertura sí incrementó de manera considerable la materia orgánica, y, dado que, el material orgánico de cobertura se descompone con el tiempo, es capaz de mejorar la biología tanto de los árboles como de la fruta, de acuerdo con la especialista de Extensión Universitaria del Estado de Oregón, Ashley Thompson, una de las investigadoras en el estudio.
“Si decides aplicar material orgánico de cobertura, esto no va a suceder de la noche a la mañana. Uno debe ser paciente, lo que supone luego un reto”, dijo Thompson en una cátedra de cerezas (Cherry Fruit School) organizada por la Universidad del Estado de Oregón y la Universidad del Estado de Washington para los productores de cereza del noroeste en el mes de marzo. “Elija un sistema para el manejo del huerto que sea fácil de seguir y mantener. Pero también habría que pensar a largo plazo: ¿Cómo podemos cuidar el suelo? El suelo es mucho más que solo tierra.
Cada vez más, los productores se preguntan cuál es la mejor manera de manejar el suelo en el terreno del huerto, lo que puede ser realmente complicado, dada la gran cantidad de decisiones difíciles que los productores deben tomar en el huerto, dijo.
Necesitan que los sistemas y procesos que eligen sean sencillos y sostenibles, y hay muchas cosas que los productores pueden hacer para mejorar la calidad de vida en su entorno, o más específicamente, en el suelo. Algunas de éstas son: tiras libres de malezas, cultivos de cobertura, coberturas de materia inorgánicas tales como geotextiles o cubiertas de película, y coberturas de materia orgánica.
En este estudio, los investigadores se centraron en las materias orgánicas de cobertura a base de carbono, que pueden incluir astillas de madera de composta, paja, periódicos, estiércol y cultivos de cobertura.
Agregar materia orgánica del suelo al sistema crea más energía para los microorganismos que pueden emplearla para liberar nutrientes para las plantas, tales como el nitrógeno, promoviendo así el crecimiento de las plantas.
Pero existen otros beneficios: mejor estructura del suelo, mayor capacidad de retención de nutrientes y agua, mayor infiltración del agua, regulación de la temperatura del suelo y reducción de la erosión.
La investigación en torno a los materiales orgánicos de cobertura en la corteza, principalmente en manzanas, ha demostrado que el material orgánico de cobertura aumenta la materia orgánica y promueve el crecimiento de los árboles de forma consistente. Pero los materiales orgánicos de cobertura también pueden aumentar el rendimiento, aunque eso puede ser inconsistente, lo que es un problema, dijo.
Su propia investigación ha demostrado que los aumentos en el rendimiento tienden a depender de la textura del suelo, con un aumento menor en los suelos arcillosos más pesados, probablemente porque esos suelos ya poseen muchos nutrientes y pueden no cambiar mucho con las aplicaciones de composta o material orgánico de cobertura, y un aumento mayor en el suelo arenoso, margoso o más fino.
El estudio iniciado por Lynn Long de la Universidad Estatal de Oregón, David Granatstein, investigador de la Universidad Estatal de Washington, y el productor de cerezas, Mike Omeg, en The Dalles, Oregón, se planteó observar la manera en la que el material orgánico de cobertura afectaba el rendimiento y la calidad de la fruta en un huerto maduro de cerezas dulces, incluido el empaque final, el tamaño de la cereza y la firmeza de la pulpa. El estudio también examina la manera en la que el material orgánico de cobertura afecta la calidad del suelo, factores físicos, químicos y biológicos.
En un huerto de Skeena sobre portainjertos de Mazzard, los investigadores aplicaron cuatro tratamientos diferentes a una hilera completa de árboles en cuatro bloques y cuatro repeticiones: una franja sin maleza, una composta de material orgánico de cobertura de huerto, productos foliares biointensivos con composta de material orgánico de cobertura de huerto y un programa de nutrición estándar.
Sin embargo, durante la plática, Thompson limitó los resultados que comparan los tratamientos de franjas sin maleza contra aquellos del material orgánico de cobertura (el material orgánico de cobertura se aplicó una vez de 4 a 5 pulgadas).
Los resultados no mostraron diferencias estadísticas en los empaques entre la franja libre de maleza y el material orgánico de cobertura. El tamaño de la fila no mejoró de manera relevante con el material orgánico de cobertura. La firmeza de la fruta en realidad disminuyó con el material orgánico de cobertura, mientras que los sólidos solubles y los azúcares no presentaron cambios. Tampoco hubo reducción en el nitrógeno de la hoja, dijo.
“El nitrógeno de la hoja es un indicador de lo bien que crece un árbol”, dijo. “Los materiales orgánicos de cobertura a veces pueden extraer el nitrógeno de los árboles, por lo que no afecta negativamente a la salud general del árbol”.
El material orgánico de cobertura también incrementó la infiltración de agua, aunque no aumentó la capacidad de intercambio catiónico, la capacidad del suelo para retener nutrientes, “lo cual es extraño, porque generalmente se ve asociado con aumentos de materia orgánica”, señaló Thompson.
Se ha demostrado que la materia orgánica adicional del suelo es muy importante para la retención de agua, crucial para los productores, ya que el agua debe ser capaz de moverse a través del suelo. “Uno no quiere que el agua se estanque en su suelo, por lo que normalmente es bueno tener una infiltración más rápida”, dijo. “El agua pasó mucho menos tiempo estancada en la superficie con dicho tratamiento de material orgánico de cobertura, en comparación con la franja sin maleza”.
En general, 2.5 por ciento de materia orgánica presente en el suelo es una cantidad razonable para los suelos de la región de The Dalles, y el estudio demostró que aumentó 1 por ciento con la aplicación del material orgánico de cobertura, “un aumento considerable”.
Para mantener la misma tasa, los productores probablemente tendrían que aplicar material orgánico de cobertura cada dos o tres años. Pero para examinar a profundidad los resultados en árboles maduros, el estudio debería continuar durante al menos cinco años, afirmó. Los investigadores planean solicitar financiamiento continuo para el proyecto.
Una nota final: un productor preguntó si el material orgánico de cobertura o las astillas de madera pudieran transmitir enfermedades como la cereza pequeña o el Western X; sin embargo, ambos requieren un huésped vivo, indicó. “Si usted compra composta y es de material vegetal, esa composta se forma a una temperatura tan alta que dichas enfermedades son eliminadas”.