Tomar decisiones sobre insecticidas que protejan mejor a los polinizadores es ahora algo común, pero los productores también deben tener en cuenta a las abejas a la hora de rociar fungicidas para controlar enfermedades en la época de floración.
“¿Cómo minimizamos el daño a las abejas sin comprometer el control de plagas y enfermedades? Esa es la gran pregunta”, dijo Julianna Wilson, especialista en árboles frutales del departamento de entomología de la Universidad Estatal de Michigan. Ella habló sobre proteger a los polinizadores de pesticidas en la Expo Comercial de Frutas, Verduras y Granjas de Great Lakes en diciembre.
Durante mucho tiempo, se asumió que la mayoría de los fungicidas eran seguros para las abejas debido a que los estudios de toxicología muestran que la exposición directa a estos compuestos no mata a las abejas en el laboratorio.
Sin embargo, estudios más recientes que analizan los efectos subletales encontraron que la exposición repetida a los fungicidas puede disminuir la capacidad de las abejas para digerir los alimentos y debilitar sus sistemas inmunológicos —indicó Wilson. No poder procesar alimentos adecuadamente supone una nutrición de menor calidad para las larvas y un aumento del estrés de toda la colonia. Eso las hace más susceptibles a los ácaros Varroa, al parásito Nosema apis y a otras enfermedades que pueden devastar colmenas.
Para proteger a las abejas melíferas de los fungicidas utilizados durante la floración, como los tratamientos contra la mancha de puntos de la hoja de cerezo (antracnosis del cerezo) o el moteado de la manzana, Wilson recomienda asegurarse de que las colmenas se coloquen fuera del huerto y en contra de la dirección del viento predominante.
“Encontrarán las flores de los árboles,” dijo Wilson, a pesar de que estén a varios cientos de metros de distancia. “A las abejas les encanta visitar los frutales de hueso y de pepita porque es polen de alta calidad.”
También recomienda calibrar los rociadores para minimizar la corriente y apagar los rociadores al pasar cerca de las colmenas.
Pero las abejas melíferas comerciales no son las únicas abejas que hay que proteger. En los huertos de Michigan, las abejas silvestres constituyen casi la mitad de las visitas de abejas a las flores de árboles frutales. En estudios recientes, Wilson encontró 99 especies diferentes de abejas silvestres en huertos durante la floración, y la mayoría eran abejas solitarias, que anidan en el suelo y que son realmente buenas para trasladar el polen. No compiten con las abejas melíferas, de hecho, parecen hacerlas más eficientes, afirmó.
“Las abejas silvestres hacen que las abejas melíferas vayan de un lado a otro, de lo contrario solo buscarían en una hilera,” dijo Wilson. “Eso es realmente bueno si necesitas una polinización cruzada como en las manzanas”.
Pero proteger las poblaciones de abejas silvestres es más difícil porque no puedes colocar las colmenas en un lugar seguro o quitar las colmenas antes de comenzar el control de plagas.
Wilson recomendó rociar cuando las abejas son menos activas, como al atardecer o después de la puesta del sol o de ser posible, cuando las temperaturas son inferiores a 55 grados. Los productores también deben elegir fungicidas que representen un menor riesgo para las abejas si tienen que rociar durante la floración.
También recomienda que después de la floración se corte la maleza con flor del suelo del huerto antes de asperjar, de manera que esta no atraiga a las abejas a su huerto durante o justo después de la aplicación del pesticida. Mencionó que es importante proveer a los polinizadores con plantas nativas en floración cerca de su huerto, dado que se ha demostrado que la diversidad de polen mejora la salud de las abejas, pero es importante también el evitar la corriente hacia estas flores.
“Mientras más fuertes sean las colmenas, mejores serán los servicios de polinización que van a proporcionar”, afirmó.
Más información sobre cómo proteger a las abejas de los pesticidas a lo largo de la temporada y del riesgo que presentan diversas sustancias químicas la puede encontrar en el Boletín de Extensión E3245 de la Universidad Estatal de Michigan (disponible en línea en bit.ly/bee-risk) o en el sitio web del Proyecto Integrado de Polinización de Cultivos en www.icpbees.org.