A toda persona que va a usar un respirador con sello se le debe hacer, de manera individual, la prueba del ajuste del respirador, antes de usarlo y después por lo menos una vez al año, o antes si se va a cambiar el modelo, estilo y tamaño de respirador, o si hubo cambios físicos en la cara del usuario.
La intención de esta prueba es que el usuario pueda seleccionar el modelo y tamaño de respirador que mejor se ajuste a la forma y tamaño de su cara. Por esto, durante la prueba del ajuste, el empleador debe proveer respiradores de diferentes estilos y tamaños para que el empleado pueda escoger el que mejor le quede.
Si el respirador seleccionado es un respirador que se ajusta y hace un sello en la cara, el usuario debe realizarse la prueba del sellado del respirador. Debe hacérsela antes de que se le haga la prueba del ajuste debido a que el usuario debe asegurarse que el respirador esté bien colocado sobre su cara haciendo un buen sellado.
Estas dos pruebas no deben confundirse. A continuación se explica cada una de las dos pruebas.
Veamos la prueba del sellado del respirador, la cual debe realizarse cada vez que el usuario se pone el respirador,
Esta prueba consta de dos procedimientos continuos, y uno es la prueba de presión positiva.
El usuario se pone el respirador y después de ajustárselo, cubre con sus manos la válvula de exhalación, la cual se encuentra en la parte frontal de la careta. El usuario exhala ligeramente para inflar la careta del respirador.
La careta debe permanecer inflada. Esto indica que hay una acumulación de presión positiva y no hay fugas de aire. Si se detecta alguna fuga, la careta se debe reposicionar y ajustar. Y se repite la prueba. Si no hubo fuga, pasó la prueba, y se procede a hacer el segundo paso.
Para realizar la prueba de sellado negativo, se colocan las palmas de las manos para tapar las aberturas de las cubiertas de los filtros mientras que se inhala ligeramente hasta que la careta se colapse.
Una vez colapsada la careta, mantenga el aire por aproximadamente diez segundos mientras mantiene las aberturas tapadas con las palmas de las manos.
La careta debe permanecer colapsada, sin evidencia de entrada de aire, esto indica una presión de aire negativa dentro del respirador.
Si no hay entrada de aire, la prueba del sellado está completa y puede usar el respirador. Pero si se detecta entrada de aire, se debe reposicionar o re-ajustar el respirador, y se repite el procedimiento de las pruebas de presión positiva y de presión negativa.
Ya habiendo realizado la prueba del sellado ahora se puede administrar la prueba del ajuste del respirador.
Existen dos procedimientos para realizar la prueba de ajuste del respirador: 1. Cualitativo y 2. Cuantitativo. En este video nos enfocaremos en el procedimiento cualitativo con el uso de “humo irritante”.
En realidad cualquier persona puede realizar la prueba del ajuste del respirador, solo debe tener la capacitación requerida y seguir el protocolo establecido por la administración de seguridad y salud ocupacional (OSHA por sus siglas en inglés)
El protocolo indica que la prueba debe de ser individual, y cada uno de los ejercicios se debe realizar por lo menos por un minuto. También debe hacerse la prueba de la sensibilidad, pidiéndole a la persona oler el humo para saber si es o no sensible.
Esperamos que con este video, hayamos podido proporcionarle información relevante acerca de dos de los requisitos para el uso del respirador, como lo son la evaluación médica y la prueba del ajuste para el uso del respirador, así como información acerca de cómo hacerse la prueba del sellado del respirador.
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Por teléfono: 509-423-0242
Por email: tsep@agr.wa.gov